El dominio, campo o terreno conceptual y aplicado de la terapia ocupacional tiene el desempeño ocupacional como concepto central, producto de la interacción de tres dimensiones: la persona con sus cualidades físicas, mentales, sociales y espirituales; las ocupaciones de autocuidado, juego/esparcimiento y trabajo/hogar/estudio; y las condiciones del contexto físico, temporal y social.
El profesional de Terapia Ocupacional debe estar en capacidad de:
- Apropiarse de los principios de la profesión, vinculándose a su tradición, sus postulados filosóficos y sus interrogantes científico tecnológico.
- Establecer relaciones con el conocimiento, con otras disciplinas, profesiones y estamentos sociales y con la realidad de las personas y de los servicios humanos.
- Afrontar exitosamente múltiples y complejos retos propios de los cambios de paradigmas y realidades locales, nacionales y hemisféricas.
- Experimentar valores éticos, estéticos y humanistas que potencien el propio crecimiento personal y ciudadano.